¿Dónde estas?, no te puedo buscar porque no sé donde hacerlo, ni sé si el camino que quiero tomar es el correcto, si me llevará donde estas tú o por lo menos cerca; ahora solo se de ti lo que están diciendo todos, que estas muerto y que ya no estas, aquí con nosotros por lo menos.
No estoy triste, hay gente al mi alrededor que te llora y te piensa, yo estoy sentado en una esquina con el celular en la mano esperando que me llames, que me digas ¡Chau Edwin!, porque tu saludas en italiano y chau es hola o algo así. Pero el celular no suena y me comienzo a preocupar, la gente comienza a preguntarse quien le dirá tus hijos y algunas miradas comienzan a señalarme y no quiero ser yo, “tienes que decirle, tú eres psicólogo, háblales bonito, diles que no sufrió”, pero no soy psicólogo, soy tu sobrino y no quiero sentirme triste, no quiero pensar en ti, no quiero extrañarte; así que ven carajo, desde donde estés, te ordeno que vengas, te pido por favor que vengas, te ruego que vengas, no me hagas esto, soy tu sobrino favorito, con el que juegas fulbito y silbas a las chicas bonitas, no me hagas esto wevon, regresa porque me estoy sintiendo triste, ves ya estoy llorando, regresa si quieres te regalo mi play y te doy el numero de Marita total a mi no me gusta, muéstrales a todos que no estas muerto, que eso no va contigo, que tu eres alérgico a esa wevada, que eso solo le pasa al resto, no a la gente feliz como tú, haz que mi mamá ya no llore, yo no sé ya cómo; el sábado fue mi cumpleaños quiero mostrarte las fotos, tomar unas chelas contigo, llama, por qué no llamas, tus hijos están por llegar, no quiero ser yo, ven apúrate, por qué no llamas, debe ser mi celular que es una mierda a veces no entran la llamadas, llama a la casa, mándame un mensaje de texto. No quiero que me veas desde el cielo. ¿Dónde estas?